L'Eglise Aristotelicienne Romaine The Roman and Aristotelic Church

[Ines..]

Se quedó impresionada por el proceso con el que Arnarion le daría la bienvenida a la familia de fieles, en especial por aquellas palabras que pronunció mientras marcaba la cruz en su frente. Apenas entendió gran cosa, Inés aún estaba perfeccionando su latín, aunque por suerte el Cardenal se tomó la molestia de hacerle entender, sucintamente, lo que dijo. Inquebrantable, recta, con esperanza, caridad, con fe. Insufló aire en sus pulmones, sintiéndose renovada con aquellas palabras que le guiarían hasta el fin de sus días, porque Inés, aunque traviesa, no dejaba de ser una buena chica que deseaba hacer el bien, y si Arnarion le decía que Dios estaba al final y que todo el dolor merecería la pena, ella, con fiel devoción, creería en sus palabras. – Acércate, patita. -No dudó y dio dos pasos al frente, hacia la pila, y comenzó a pronunciar ella también aquellos sortilegios. Una vez pronunciadas todas las oraciones, ese sería su contrato con Dios, con la Iglesia y con todos los aristotélicos que formaban parte de ella.

Agnosco Deo mundi machinam,
Summus cogitatione rerum causam efficientem et finalem.
Agnosco Ecclesia duce Aristotelica
Iuro in cognitione Dei y Fidem Iesu
auctoritate solum repraesentativum Divini in tellure.
Accipio omnia pro salute mea
animam meam a deo
pulchritudinis contemplatione aeternorum.
Y nomine meo baptizati videri volo
servus Dei omnipotentis.

Testor coram Aristoteles, & in scripturis sanctis
semper in re publica primum
Aristotelis Ecclesiae , et apostolicae Romanae .

Agnosco subiecta triplicem Aristotelis obedientiam :
sacrae hierarchiae ab Christos
ad obedientiam, dogma ,
canonica obedientia .

Vovi Christus & in scripturis sanctis
& Pope semper primement ejus repraesentativa .
Et cognovi quod ordinatur ad hoc sacramentum
allegiances meam , et obsequium obligationes .

Vovi Arnvald & in scripturis sanctis
implere iuramento usque ad mortem
usque in diem qua concitantur vel volo.


¿Qué era un simple compromiso a cambio de la salvación del alma?
Inocente y juvenil ora, Inés descubriría, con el tiempo, que siempre sería puesta a prueba.
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Queen of Navarre | Princess of Ischia di Castro | Duchess of Billy | Child of Castile | Countess of Tafalla | Baroness Palatine of St John Lateran | Lady of Bressolles
Prefect of the Court of His Holiness Sixtus IV

[Arnarion]

Habia leyenda sobre el Cid, valiente guerrero de la corona de castilla y modelo del noble caballero orgulloso luchando por su rey, su tierra y su fe. Hoy nace la leyenda del cisne de roma que va a luchar por su Dios y su fe por todo el mundo.

Arnarion asintió cuando declaró su lealtad a la Santa Iglesia. En medios seculares, esto habría terminado con una bofetada en la cara, simbolizando su compromiso al servicio de su Señor. Si fuera en la misma línea, la Iglesia le habria hecho eso. En cambio, estaría inmerso en agua completamente bendecida por la gracia divin para renacer como un pájaro inmaculado.

El agua de la vida. Inès, al avanzar ahora hacia este bautisterio, al recibir esta agua en tu cabeza, pronto morirás.

Se callo por un momento antes de hablar de nuevo. Pero su voz se hizo más profunda como la de un predicador. Miró a la niña, su mano izquierda sobre el hombro juvenil y su mano derecha apuntando hacia el cielo.

Sí, Inès. Vas a morir ... Y renacer de inmediato ! Porque la mujer que eras, perdida en la oscuridad, ha sido encontrada por su pastor divino. Ahora renacerás en la luz !

Él le sonríe con una sonrisa llena de ternura casi paternal. Sus ojos, sin embargo, traicionaron un estado de intensa agitación.

Estás a punto de recibir por primera vez la gracia santificante que entrará en tu espíritu e inundará tu alma con el Don de Dios. Ah! Si supieras el don de Dios; hija ! Apreciarlo ahora más que nada porque está por encima de todo y es él quien te guía a Dios. Él es la vida real: el amor. No hay mas cosa importante que el amor de Dios, eso es lo que realmente importa en este mundo. Amor, amor y amor! El amor de Dios, el amor de la familia, de tus hermanos, de tus amigos, del pueblo de Dios, de tus enemigos ... El amor y la caridad en el nombre de Dios todopoderoso ! Nunca olvides eso.

Se detuvo por un momento y se calmó. A su edad, la agitación no era una buena amiga, y no debe morir al instante. Con la pequeña copa removió la superficie del agua bautismal perdido en sus pensamientos. Él reanudó en un tono solemne.

Inés Álvarez de Toledo Josselinière ! Si tienes fe, avanza.

Tracé con su pulgar una cruz en su frente mientras pronunciaba suavemente el exorcismo.

Exi ab ea immúnde spíritus y da locum Dei creatorem mundi.

Y mientras se inclinaba para admirar el hermoso telón de fondo de piedra del baptisterio, Arnarion hundió una concha vieira en el agua y la vertió tres veces, pronunciando:

Ego te baptizo, ☩ In Nomine Sancta Ecclesiae, ☩ Altissimi creator, omnis Sanctis amicitia et ☩ per caritatem Sancti Patris hominum.

Luego tomó una pequeña botella de oro que contenía un poco de un aceite muy fragante con aromas orientales. El Santo Crisma era un aceite muy especial que, según se dice, provenía de Judea o Arabia, que se usaba para la unción de los reyes de la antigüedad como emblema de consagracion a Dios. Si era costumbre usar un aceite así para los bautizos, el que estaba usado por el viejo cardenal era muy especial. Ella vino de Nazaret, la misma ciudad donde vivía el fundador de la Santa Iglesia. Allí se dijo que los tres reyes magos le ofrecieron este aceite cuando siguieron la estrella hasta Belén. Y tambien se dice que un poco de la pulga de estrella cayó en el jarrón de aceite. Mantenido oculto durante siglos, se ha conservado hasta su descubierta en las ruinas de lo que fue la ciudad de Maria y de Josep. Y Arnarion había recogido lo suficiente para llenar la pequeña botella que sostenía entre sus dedos. Reservado, por supuesto, para usos muy especiales.

Trazó con la punta de los dedos tres cruces, una en la frente y otras dos en la boca y en el corazon.

Bienvenido al mundo, Inès. Que vivas en amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, benevolencia, fe y caridad.


Luego tomó una vela grabada con el nombre de la nueva bautizada I.J. y el suyo como cardenal SE.A.V. Se lo entregó a Felipe para que se encendiera y se lo entregara a Inés.

[Felipe...]

Felipe no quitaba ojo a la ceremonia del anciano cardenal, por un lado porque era un momento muy especial para la familia, para los tres hermanos que habían nacido en el seno de una familia de herejes reformados, y que con este paso parecían romper ese vínculo con el pasado para enmendar los errores de sus padres. Y por otro, porque el joven sacerdote tomaba nota mental de cómo hacer apropiadamente la ceremonia del bautismo, algo que probablemente le tocaría oficiar a él mismo antes o después en la parroquia de la cual era vicario. Arnarion era un hombre complicado de entender, en unos momentos parecía totalmente consumido por la edad, como si perdiese la vitalidad por completo, y de repente sacaba fuerzas de no se sabía dónde para continuar con lo que tenía entre manos. Felipe vigilaba que todo sucediera como era debido, e incluso preparado para despertar al anciano cardenal si fuera preciso una vez mas.

Cuando su hermana ya había sido bautizada con el agua consagrada y con aquellos óleos sagrados, el benjamín de la familia tomó el cirio y lo encendió con otras velas próximas al baptisterio. Se lo entregó a su hermana diciendo: - Recibe este cirio encendido, cuya luz significa la renovación de Dios que ahora hay en ti, y cuya llama iluminará tu vida en el camino hacia la salvación. No temas si la senda es tortuosa y oscura, pues el Altísimo siempre estará a tu lado.

Luego sacó de una bolsita de terciopelo una medalla de plata con esmaltes de aguamarina que colgaba de una finísima cadena y que colocó en torno a su cuello: - Recibe también esta medalla, que te identifica de ahora en adelante como hija de Dios y como fiel de la Iglesia Universal.

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_______.______Sanctae Mariae Rotundae cardinalis episcopus | Archiepiscopus Burdigalensis
__________..Secretarius brevium ad Principes | Sanctae Sedis Vice-cancillarius et Magnus Auditor

[Arnarion]

[Ines..]

El pecho de la joven, henchido de orgullo al escuchar cada palabra del cardenal, fue poco a poco bajando al sustituirse aquel sentimiento por el temor. ¡Qué locura era aquella! ¿Morir? ¿Le matarían? ¡Ay! Inés se llevó las dos manos bajo el cuello, temerosa de lo que pudiera acontecer, pero no cesó en escuchar lo que se le decía, porque sólo así, con luz, combatiría su temor, la oscuridad. La joven Álvarez de Toledo avanzó igualmente, porque confiaba en el cardenal Valyria más que en nadie, un ser tan sensible y atento con los patitos no puede hacer daño a nadie. Le hablaba de cosas muy poderosas, de cuestiones que una mente tan juvenil no podía comprender del todo, del sentido de un proceso en apariencia sencillo pero que encerraba toda una simbología tras de sí, del amor, de renacer, de avanzar si se tiene Fe. ¿Tenía fe? No estaba muy segura de tenerla, y si la tenía no sabía si era tan distinta de la que se le inculcó desde nacimiento. En ese momento tenía muchas dudas, mas era lo que podía esperarse de su joven edad y de las enseñanzas recibidas hasta ahora, y aunque no dijo nada, tampoco ocultó en su rostro el pequeño gesto de inseguridad que le embargaba. Inés inclinó la cabeza y recibió en tres ocasiones el agua sagrada de la pila, y tras ello el óleo mientras le dibujaba cruces para purificar su pensamiento, limpiar su lengua de palabras vacías y proteger su alma del mal que hasta entonces le acechaba viviendo en la herejía. Pim, pam, pum. Así de sencillo lo hizo el cardenal, dándole la bienvenida en la Santa Madre Iglesia Aristotélica y deseándole vivir en armonía. ¡Cuán dichosa se sintió en ese momento! Ya no sería más un patito feo, en palabras del cardenal.


Ahora sería un bello cisne. - Adoro te devote. –Dijo con suma delicadeza, como si casi tuviese miedo de decirlo en voz alta, mientras tomaba de su hermano el cirio con las iniciales del cardenal y las suyas propias, al mismo tiempo que agachaba ligeramente su cabeza para permitir que le colocasen la medalla aristotélica. Tras aquello, dirigió una trémula sonrisa a su hermano, apretando los labios; aunque estaba vestida con las más finas telas y de los tonos más virtuosos, ahora se sentía desnuda ante los ojos de Dios, y eso le cohibió durante los primeros minutos, en los que no supo qué hacer, por lo que todo lo que hizo consistió en mirar a sus hermanos con una profunda alegría, y en último lugar al Cardenal Valyria, con auténtica admiración, a quien se propuso limpiarle los pies antes del banquete que tendría lugar como celebración de su bautismo. Sería algo muy sencillo, apenas la familia y sus buenos amigos, regándolo todo con un buen vino mientras los patos caminaban a sus anchas por el lugar.

Antes de abandonar el lugar, Inés se agachó un instante para tomar entre los brazos a uno de los patos, mientras aun sostenía con su mano libre el cirio encendido. - Gracias, padre Arnarion. –Sonrió.
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Queen of Navarre | Princess of Ischia di Castro | Duchess of Billy | Child of Castile | Countess of Tafalla | Baroness Palatine of St John Lateran | Lady of Bressolles
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