L'Eglise Aristotelicienne Romaine The Roman and Aristotelic Church

[Isabella_fontana]

Isabella no hacía más que buscar apuntes y rezar sin detenerse. Tenía, debía encontrar la ubicación de la ermita, donde de pequeña, junto a sus padres y hermano, habían peregrinado.
Recordaba que fue después de una larga enfermedad de su madre y que su padre, médico no podía curarla.
Fue en ese momento que su nana Clarencia, les habló de la fuerza de San Miguel Arcángel, del cual era devota.
Tanto oraban su hermano Gasper2011 y ella, que su padre comenzó a escucharlos.
Vivieron siempre en un hogar totalmente creyente aristotélico. Pero tanto rezo de dos pequeñas criaturas llamó la atención de su padre.
El padre rezó con ellos eso lo recordaba muy vivamente, sintió en ese momento, a pesar de ver en los ojos de su padre la desesperación por su esposa, que todo estaría muy bien, que su salud mejoraría. Su padre ya no estaba enojado con el mundo, pudo sentirlo cuando los tomo de las manos y rezaron los tres de rodillas.

Hoy más de 20 años, buscaba y buscaba.
Se la vio caer de rodillas he implorar al Altísimo por esa ermita y sus reliquias.
Ya era de madrugada, Isabella de rodillas aun, con sus manos apoyadas en su humilde cama, apoyó la cabeza y sin darse cuenta , en esa posición quedo dormida
Cuando despertó ya su cara no reflejaba la tristeza y angustia de cuando se durmió. Podría ser que el Señor en toda su Bondad la hubiese consolado o quizás sus dudas fueron solucionadas??.
Se levantó como pudo de esa mala posición, se arreglo cambiando sus ropas arrugadas, lavo su cara y manos, se peinó y salió de la habitación rumbo a la cocina, debía comer algo, se sentía desvanecer, hacia muchas horas que no probaba bocado.
Su hermano Gasper estaba preparando su propio desayuno, se saludaron, el le pidió que se sentara y le dijo que se encargaría de todo. Sonrió y cuando sus desayunos estaban sobre la mesa, se tomaron las manos y rezaron alabando al Señor Todo Poderoso y Eterno. Lucecilla que entraba con la moza joven, Martina, se unieron a las oraciones, alabando al Altísimo.

Hermano, queridas hijas mías en la Fe. He soñado y el Señor se apiado de mis rezos, abriendo mi mente y haciendo aflorar mis recuerdos.
Recuerdo donde esta la ermita, a la que fuimos cuando pequeños, para agradecer la salud de mamá.
Gasper hermano tenemos trabajo, puedes ayudarme?.

Gasper miró a Isabella y le sonrió, sabía que cuando su hermana comenzaba a hablar, jamás podía detenerse.

Sabes hermana que puedes contar conmigo para lo que se necesite. Estoy a tu disposición.

Gracias hermano hay cartas que enviar y hasta la Reina de Castilla y León, si Majestad Froda, esta interesada por las reliquias pues San Miguel Arcángel será, si el Altísimo así lo desea, el Patrono de Castilla.

Por lo que recuerdo el camino era muy malo o eramos muy pequeños.

Los dos se miraron y por un momento sonrieron.

Lucecilla pregunto lo de las reliquias, entonces Isabella le contó lo acontecido por su madre y como fue sanada por la Gloria de Dios, por medio de la reliquia de San Miguel Arcangel y como luego peregrinaron a su ermita, en agradecimiento.
Terminado el desayuno, ya Isabella se sentía del todo bien y los hermanos se retiraron para hacer las tareas necesarias.

Hermana, pienso que su Majestad la Reina Froda, pondrá a su guardia personal para que nos ayude con las reliquias. Quizás siendo ella una Aristotélica, pueda conocer el lugar y honrarlas en primera instancia.

Tienes razón, hermano unas buena cantidad de cartas tengo que escribir, el Señor me asista y el pulso no me falle. Hoy es un día muy especial, comenzamos con una tarea muy importante, para la Gloria de Dios y del Arcángel San Miguel. Ya deseo por la gracia de Dios estar allí querido hermano. Ver las reliquias y quizás el pequeño relicario que le habían traído a madre cuando se moría.

Isabella se retiro a su escritorio y su hermano Gasper2011 a la biblioteca familiar para trazar el mapa y ya poner todo rápido en marcha
_________________
fides scutum nostrum est, amor telum nostrum est

[Gasper2011]

Isabella le había contado su sueño e imágenes fugaces iban y venían en la mente de Gasper, recordando a sus padres en la época cuando el aún era un niño, el viaje a una antigua ermita, una gran emoción llenaba el pecho del estudiante que sin pensarlo decidió ayudar a su hermana en su busqueda.

Tras pasar horas y horas en la biblioteca consultando los libros que pertenecían a su padre, Gasper comenzó a trazar un mapa, apelando a los recuerdos y a la información que había encontrado, poco a poco todo iba tomando forma.

Querida Hermana, esto es lo que pude encontrar!

Extendió su mano con trozo de pergamino donde había dibujado unos garabatos, dando por resultado un mapa con la ubicación aproximada de la ermita.
_________________

Cura de Aranda de Duero | Vice-Prefecto Hispano Villa San Loyats |Rector y Profesor Titular Seminario Fray Tanys

[Isabella_fontana]

Después de más de un día de trabajo, que ni le vio la nariz a su hermano, ya que hasta el almuerzo y la cena, los pidió en la biblioteca.
Escucho como Gasper la llamaba. Acudió presurosa, se saludaron y Gasper le tenía reservada la mejor noticia del mundo.


Querida hermana, esto es lo que pude encontrar!

Con una sonrisa que se le escapaba de la cara, tomo el pergamino. Se encomendó a Dios y a los esfuerzos de su hermano. Entusiasmada lo abrió y los recuerdos de la infancia afloraron.

Hermano esta muy real, eres casi un cartógrafo.

Los dos rieron. Gasper le recordó cuando habían tenido que dejar el carruaje familiar y seguir a lomo de caballo, como reíamos, tan pequeños toda una aventura.
Recuerdos y más recuerdos. Se los extrañaba tanto a los padres.

Hermano querido ya mismo escribo a la Reina, que Dios me acompañe que apenas la conozco. Espero saber expresarme correctamente.

Abrió de nuevo el pergamino con la ubicación aproximada de la ermita y una lágrima rodó por su mejilla.

Gasper tomó su brazo.

Estoy bien hermano, muy bien, solo recordaba a nuestros padres, a su amor por nosotros, a la Fe que supieron inculcarnos desde pequeños, a su bondad para con todos los que se les acercaban, estoy muy bien.
En ese mismo lugar los dos hermanos se arrodillaron y rezaron, dando gracias al Altísimo por iluminar la mente de Gasper y poder encontrar lo que se buscaba.

[Isabella_fontana]

Ya en su despacho , Isabella tomo un pergamino, que tenía su blasón pluma y tinta, respiró hondo y se puso a escribir.

Citation:

Monseñor Isabella Fontana Olavarrieta Palacios Prefecto de las Capillas Vicario General de la Archidiócesis de Tarragona Cura de Barcelona Miembro del Consejo Diocesano Teckel de pelo corto Excelentísima su Graciosa Majestad Doña Froda de Olivares Santisteban Reina de Castilla y León. La presente es para saludarla y desear que Nuestro Creador cuide cada acto de Vuestra vida. Espero se encuentre muy bien de salud. Después de mucho rezar y encomendarme al Altísimo, se ha producido una gran bendición. Ya sabemos donde esta la ermita de San Miguel Arcángel y por ende las reliquias tan apreciadas . Mi hermano trazo un mapa; con los datos que recavo de nuestra biblioteca, esas referencias eran de mi padre; donde se encuentra la posición de la ermita. Pensando en el cuidado del traslado de las reliquias para poder llevarlas a que sean aceptadas, quizás sus guardias personales y hasta Usted majestad quisieran venir en peregrinación por ellas, siempre llevando el estandarte de la Santa Madre Iglesia Aristotélica y el de Castilla y León, donde si Dios así lo quiere, tendrán descanso para siempre. De esa manera se lograra un lugar seguro de peregrinaje, en Castilla y León, para la Gloria de Dios por intermedio de San Miguel Arcángel. La ermita en cuestión se encontraba en un pequeño feudo que hace mas de 70 años ha sido destruido y abandonado; queda al costado de una antiguo cementerio abandonado hace más de dis siglos. Este es el mapa en cuestión, con mi hermano y algunos amigos, saldremos de inmediato camino a la ermita, estoy emocionada por estar nuevamente en ese sitio tan importante a nuestros sentimientos. Estimada Majestad lo que necesite y este a mi alcance no dude en avisarme y yo trataré de resolver la situación. Le deseo que el Santo Espíritu la ilumine siempre y en cada decisión que tome, este inspirada en la grandeza para su Reino, motivo de su vida. Me despido de usted y le deseo Sabiduría, Coraje, Fuerza, Grandeza y sobretodo Generosidad en su reinado. Dios nos conceda una hermosa semana llena de Amor y Bendiciones. Escrito en Barcelona el día XXIV del año de Gracia de Nuestro Señor MCDLXII

Tomó un sobre , lo cerró y lo lacró. Inmediatamente llamó a Lucecilla, para que un mensajero lo llevara a Castilla y León y que llegara a manos de su majestad la Reina Froda.
Ella subió a su habitación a preparar un pequeño equipaje para ya poder ponerse en marcha muy temprano por la mañana.
_________________
fides scutum nostrum est, amor telum nostrum est

[Isabella_fontana]

Cuando Isabella entró a su dormitorio, en su escritorio, vio la carta al Cardenal Lisandro, vecino también de Barcelona.

Cómo puede ser que esta carta esté aún sobre mi escritorio.

Lucecilla, muchacha por favor, corre , estoy en mi dormitorio.

Leyó nuevamente la carta , estaba perfecta.

Citation:

Monseñor Isabella Fontana Olavarrieta Palacios Prefecto de las Capillas Vicario General de la Archidiócesis de Tarragona Cura de Barcelona Miembro del Consejo Diocesano Teckel de pelo corto El Altísimo siempre nos cuide. Su eminencia Padre Cardenal Lisandro, ya mi hermano ha hecho el mapa donde se encuentran las reliquias de San Miguel Arcángel. En la biblioteca familiar ha encontrado los datos que mi padre dejo archivados después de nuestro viaje. El camino no es sencillo, pero la bendición es enorme para nuestra Santa Madre Iglesia. El sacrificio vale todo. Castilla y León de estar todo en orden tendrán su santo Patrono y las reliquias, que serán lugar de peregrinación. Ya escribí a su Majestad Doña Froda de Olivares Santisteban Reina de Castilla y León. Son varios días de camino, podrá su eminencia, mi guía espiritual acompañarnos? Usted no debe preocuparse por nada, la comida ya esta lista, algunos vecinos muy amigos nuestros, han traído muchas cosas ricas para el viaje, hasta algo de vino hay. Iremos primero en nuestro carruaje familiar que mi hermano conserva en perfecto estado, nuestro viejo cochero quiere ir, dice que recuerda un poco del camino y con a ayuda del mapa llegaremos con bien a destino. Si usted esta dispuesto a unos días de andar y rezar, pues ya en breve partimos. Estoy muy emocionada, no se lo puedo negar. Estar en esa ermita nuevamente, me ha puesto a rezar mucho por mis padres. Los Caminos del Señor son tan enigmáticos, jamás había vuelto a pensar en esa ermita, en esa peregrinación, ni siquiera en la curación de mi madre. Padre Cardenal Lisandro, usted me dirá que desea hacer o cuales son sus planes actuales. De la manera que sea llevaremos el estandarte de nuestra Santa Madre Iglesia con nosotros. Nuestros Profetas nos ayudarán y todo será una gran bendición. Dios esta con nosotros, yo jamás lo dudo. Espero su respuesta y terminamos de solucionar los últimos detalles, de los cuales se ocupa Gasper todo el tiempo. Bendiciones y que el Señor jamás nos suelte de Su Santa Mano. Escrito en Barcelona el día XXIV del año de Gracia de Nuestro Señor MCDLXII

La metió en un sobre y lo lacró, en el mismo momento que Lucecilla entreabría la puerta.

Niña que también entreguen esta carta, que se me quedó en el escritorio. No se donde tengo la cabeza hoy.

Le dio unas monedas para que le diera al mensajero. Paso seguido, se sentó por un momento, para pensar que llevar para el viaje por las dudas que nevara y el frío , el viento fueran muy fuertes.
_________________
fides scutum nostrum est, amor telum nostrum est

[lisandross]

Lisandro terminaba sus primeras oraciones del día en aquella oscura mañana invernal, las nubes pesadas anunciaban precipitaciones, pareciera que las velas quedarían todo el día, lo que provocaba un ambiente bucólico. Al escuchar a la puerta un mensajero que se anuncia, alza la voz para decir que ingrese, era un mensaje de la Monseñora Isabella Fontana, por el sello que le era muy conocido y grato.

Desde los tiempos de seminarista de la Monseñora Isabella hasta la fecha siempre estaban muy cercanos en proyectos pastorales y por la dedicación de ambos a la oración. Una persona con mucho carisma en su comunidad, ahora ganaba más responsabilidades en la congregaciones romanas.

Mira cuidadosamente el mapa adjunto y se alegra de ver nuevamente los caminos que lo llevaron un día a Pucela, donde ha dejado muchos amigos, y un día esperaba poder regresar y reencontrarlos. ¿Sería una señal del Altísimo?

Toma la carta de la Prefecto de las Capillas y analiza atentamente. Era una maravillosa noticia, nunca había tenido conocimiento que podríamos tener en tierras hispánicas reliquias de un Arcángel, una sonrisa le brota del alma y siente que la carta se alumbra en aquel ambiente iluminado solamente por las velas. Comentaba también de una curación en su familia lo que aumenta la confiabilidad de que se tratbe de una reliquia verdadera.

Inmediatamente se hace de un pergamino y escribe unas escuetas líneas:

[Isabella_fontana]

Mi alegría fue muy grande cuando recibí la contestación de Padre Cardenal Lisandro. En breve le llegaría la carta a su majestad la Reina Froda.
Ya casi teníamos todo listo para partir, realmente estaba muy emocionada.

En la noche no podía dormirme, solo miraba el cielo, traté de relajarme buscando estrellas. Me di cuenta que mañana por la noche habría luna llena. Si no descansábamos en ninguna posada tendría luz en la noche.
Pero seguramente descansaríamos y los caballos también.
Temía realmente que saliera el sol y yo sin poder dormir, lo peor sería después en el carruaje y durante el día dormir con el suave movimiento.

Unos golpecitos muy suaves en la puerta, me despertaron, di gracias a Dios por haber podido dormir.
Era Lucecilla que me avisaba que aún era temprano, pero que era mejor que desayunara, para después no marearme en el carruaje como suele suceder siempre.

Tenía razón, me lavé, me vestí y después de arreglar mi cabello, que de dar tantas vueltas en la cama, parecía nido de pájaro, baje a la cocina.

Misia Pepa ya tenía todo presto, me senté y las miré, les pedí que me acompañaran las dos a rezar y comer algo. Sabía que en un tiempo no las vería y deseaba su compañía, en este momento.

Mientras comíamos algo, misia Pepa me comentó que ella y nuestro peón Jacinto irían con nosotros con una carreta, preparada para reparar una rueda, un eje o lo que se presentara.

Mi hermano Gasper había pensado en cosas más prácticas, cosas que en las que yo jamás pienso. Eso me tranquilizó bastante y creo que hasta me abrió el apetito.
Al terminar de desayunar, apareció Gasper, nos saludamos y le agradecí, por las cosas en las que había pensado y yo no.

Uno de nuestros mozos, me comentó mi hermano, había salido el día anterior para ir marcando el camino a seguir cuando, el camino principal se interrumpiera.

Después de enterarme de eso, fui a la biblioteca, busqué hasta que lo encontré, el escrito que años después hizo mi madre para narrar todo lo ocurrido en el viaje que realizamos, para agradecer por su sanación.

Tuve la fuerte sensación que todo saldría muy bien para la Gloria de Nuestro Creador.
Al tener todo lo necesario ya listo, me retiré a la capilla familiar a rezar por un momento, así me prepararía mejor para el viaje, recién estaba amaneciendo, por lo tanto había un tiempo para mi meditación.
_________________
fides scutum nostrum est, amor telum nostrum est

[Isabella_fontana]

Cuando ya estábamos listos a partir y despidiéndonos de los que cuidarían la casa parroquial. Se escuchan las campanillas de la entrada.
Lucecilla se encargo de abrir y recibir un correo del Obispado, que me entregó con mucha premura.

Temblaba, ni se como pude romper el lacre y leí emocionándome como es mi costumbre.



Miré a los presentes, mi hermano se adelantó y me abrazo felicitándome.
Mi alegría se llenó de lágrimas de amor, mi trabajo era reconocido y bendecido por el Señor.

No se que decir, disculpenme, solo que soy feliz. Se que es mucho trabajo. Una tarea intensa, pero ya me conocen, dejaré todo en ella.

Todos me besaron y abrazaron, yo temblaba como una hoja al viento.

Creo que quizás deba transportar todas mis cosas, quizás ya me quede por Castilla y León y ayudar más desde ese lugar con las reliquias.
Disculpen estoy muy nerviosa, alegre, nostalgiosa, es una suma de sentimientos.


Lucecilla y la joven moza Martina, expresaron su deseo de viajar conmigo.
Ya estaba la otra carreta pronta, les dije que si, si podían acompañarme en mi nuevo destino, que empacaran sus cosas, que había tiempo.

Las vi como corrían a sus habitaciones de la mano y riendo de alegría.
No estaría tan solita en Valladolid.
Mi mellizo Gasper2011 cuando uedamos a solas, me abrazó tan fuerte que sentí cada uno de mis huesos.

Hermano, rezo todos los días a Nuestro Señor, para que ya termines tu seminario y que Barcelona sea tu destino. Mucha gente querida dejo aquí, deseo que estés aquí para cuidarloslos a todos.

Vamos hermana, vamos a terminar de buscar todas tus cosas, yo iré a la biblioteca a acomodar todos tus libros y tu te encargas de tus poquitas cosas.

Cada uno tomó un camino distinto para apurar tiempos, no quería hacer esperar al Padre Cardenal Lisandro, se que me tiene una paciencia de santo, pero no quiero abusar de su bondad.

En breves momentos ya estaba todo listo, cuando me despedía de los que quedaban en la casa ya Lucecilla y Martina estaban sentadas en la carreta con sus bártulos listos, el cochero estaba presto, con todas las herramientas y repuestos que se pudieran necesitar en el camino.

Nuestro viaje comenzaba, sabía que debía decir algo antes de salir.

[lisandross]

Con los carruajes listos y los escuderos perfilados en perfecta orden frente a su casa el Cardenal avanza en revista a los suyos, todos trabajadores y fuertes hombres y mujeres dedicados a la Santa Madre Iglesia Aristotélica, en quienes depositaba la confianza de su vida en los peligroso caminos que os aguardaban. Como sus vestimentas impecables se reflejaban la orden de cada miembro del grupo allí reunido. Se voltea al mayor de sus escuderos y, cuando solicitaría los informes, es interrumpido por un carruaje que se acercaba a paso acelerado, entonces comenta:

- Buenos días, estimado Miguel, parece que alguien se nos anticipó en la partida, ¿tenemos todos listo?

El fiel amigo le contesta:

- Buenos días, Monseñor Lisandro, organicé la carga de todo lo solicitado y Clemente dispuso unos documentos pendientes que llegaron de la Nunciatura para su revisión, tendremos bastante tiempo en este largo viaje, y también destaqué dos mensajeros que nos acompañen.

Asintiendo con la cabeza Lisandro aguarda la llegada Isabella, ya suponía que era su carruaje en aquellas horas en que las calles se encontraban vacías todavía, una buena hora para partir. Hace señal a los escuderos para que permitan campo para que se acerque hasta su posición.
_________________

[Gasper2011]

Las cosas transcurrían de un modo muy presuroso, un día se estaba preparando un carruaje para llevar una comitiva a localizar una antigua ermita en el Reino de Castilla y a siguiente, con el nombramiento de la hermana de Gasper, Monseñor Isabella Fontana, como Obispo de Segovia, se organizaba una caravana para pasar una larga temporada en la dicha Diócesis.

Gasper estaba muy emocionado con el nombramiento de su hermana, se acerco y la abrazó inesperadamente, olvidando el protocolo que debía seguir ante a un obispo en público, pero era una noticia que estaban esperando con muchas ansias.

Hermano, rezo todos los días a Nuestro Señor, para que ya termines tu seminario y que Barcelona sea tu destino. Mucha gente querida dejo aquí, deseo que estés aquí para cuidarlos a todos.

Vamos hermana, vamos a terminar de buscar todas tus cosas, yo iré a la biblioteca a acomodar todos tus libros y tu te encargas de tus poquitas cosas.

Tras haber finalizado todos los preparativos para iniciar la larga travesía, Isabella elevó una bella y emotiva oración y bendijo a todos con agua bendita para llegar a destino sin inconvenientes y una vez concluida la misma, al unisono, todos los presentes pronunciaron - ¡Amén! - para luego proceder a abordar sus respectivos carruajes y comenzar la marcha.

Las calles permanecían en silencio en aquellas horas del día, la comitiva se dirigía a buen ritmo con dirección a la residencia de Su Eminencia Reverendísima Monseñor Lisandro Siqueira Da Silva, Cardenal Nacional Sufragáneo Hispánico, quien se encontraba esperándolos con sus respetada guardia.

Al momento de detener la marcha, un sirviente se apresuró a abrir la portezuela del carruaje e inmediatamente Gasper bajó del mismo para ayudar a la Obispo a descender y seguidamente acompañarla a saludar al Cardenal.
_________________

Cura de Aranda de Duero | Vice-Prefecto Hispano Villa San Loyats |Rector y Profesor Titular Seminario Fray Tanys

[Isabella_fontana]

Los saludos fueron muy afectuosos, como lo son entre miembros de una misma familia y ellos lo eran, de la Gran Familia Aristotélica.

Isabella no podía disimular sus nervios por ya ponerse todos en marcha.
Noto la escolta del Cardenal Lisandro, se sintió feliz y más tranquila.

Los hermanos Olavarrieta Palacios, prefirieron viajar en el carruaje de su Eminencia Reverendísimo Monseñor Lisandro.

El día era hermoso, como la bendición que dio el Cardenal dio antes de comenzar el viaje.

El Altísimo nos estaba bendiciendo desde el Paraíso Solar.
Subimos al carruaje y se dio la orden de partir.

Ya estábamos más cerca de la ermita, yo rezaba para que todo estuviera bastante mantenido y poder dar con las reliquias. Tantos años y volver, recordé a mis padres y seguí rezando. Las primeras horas fueron algo, como expresarlo largas, creo que yo tenía miedo de ser muy efusiva y meter la pata con mis cuentos e historias, mi hermano dice que soy una parlanchina, por eso traté de disimular, igual tendríamos varios días para poder hablar.

Miraba el paisaje y daba gracias a mi Creador por todos los bellos regalos que siempre nos ha dado.
El camino se encontraba bastante bien, hacía varios días que no llovía eso ayudaba bastante.
Comimos algo muy frugal en el carruaje, unos bocaditos y un poco de te bien caliente que nos proporcionaron.
Avanzábamos a buen ritmo y sin querer una buena tertulia nos atrapo a los tres.
El atardecer parecía que llegó bastante después de lo previsto. Los días ya se alargaban, el invierno muy pronto terminaría, dando paso a una exultante primavera, para alegrar nuestros sentidos. Ya bien entrada la noche de luna llena , nos detuvimos en una posada para pasar la noche más cómodamente y que los caballos descansaran.

Bajamos del carruaje algo cansados, a pesar que lo único que habíamos hecho era estar sentados.

El jefe de la custodia de su Eminencia , nos comunico que la jornada había sido muy positiva que habíamos adelantado mucho más de lo que el había pensado. Por eso había mandado reservar cuartos en esta posada mucho más lejana.

Entramos y nos recibieron el posadero, su esposa e hijos, quienes se desvivían por hacernos sentir cómodos.
Gente sencilla, muy amables y educados.

Nos retiramos a nuestros aposentos para refrescarnos antes de la cena.
Lucecilla y Martina vinieron conmigo. En una habitación conjunta a la mía, dormirían pegadas a mi, por si necesitaba algo, me pareció muy bien estar juntas, de esa manera yo estaría más tranquila por su seguridad.

A la media hora nos encontramos para cenar.
Ya en la mesa, la bendición de los alimentos no se hizo esperar.
Me gusto como los dueños de la posada se nos juntaron para orar. Nos dijeron, después, que la ciudad estaba bastante lejos como para asistir seguido a misa. Estaban realmente contentos de darnos alojamiento y rezar fue para ellos como una bendición que no se la esperaban.

La comida, sencilla, deliciosa.
Luego de la cena , nos despedimos hasta mañana si Dios quiere.

Realmente dormí como hacía algún tiempo no lo hacía, muy tranquila y relajada. Me despertó Lucecilla para que me empezara a preparar que ella me ayudaría. Aún era de noche, pero sabía que yo necesitaba mi tiempo de rezo y meditación, antes del desayuno.

Martina había bajado para ayudar un poco en la cocina a los dueños de la posada ya que la comitiva era numerosa y yo la conozco tanto que les pediría un te especial para mi, me mima mucho y sabe que me agrada beberlo con media cucharadita de miel y un poco de limón exprimido.

Me vestí y comencé con mis oraciones matinales, hasta que me avisaran de desayunar.
Lucecilla se arrodillo un poco detrás de mi y rezamos juntas.

Todos reunidos alrededor de la mesa que el Cardenal bendijo, nos sentamos y comimos algo como para resistir casi todo el día. El carruaje se movía y no queríamos parar por sentirnos descompuestos.

Nos despedimos de los dueños y seguimos el viaje. Todos esperábamos que con la bendición de Dios adelantáramos tanto como la jornada.anterior.
_________________
fides scutum nostrum est, amor telum nostrum est

[lisandross]

Una nueva jornada iniciaba con la bendición del Altísimo, el viaje seguía sin imprevistos y los hermanos Olavarrieta parecían adaptarse bien a los largos recorridos. Entonces el purpurado entrega a la Moseñora Isabella un pergamino diciendo:

- Estimada Monseñora Isabella, repasemos la Hagiografía del Arcángel San Miguel para pedirle que nos proteja en esta peregrinación que hacemos y que lleguemos bien a nuestro destino.

- Me gustaría que me narrase un poco sobre las reliquias y que recuerdos tienen para que vayamos registrando por escrito lo que posteriormente presentaremos a Roma, para solicitar el reconocimiento de dichas reliquias. Ya tengo el mapa que realizó el Hermano Gasper.

Por la ventana ya se podía ver el cambio de paisaje en este inicio de primavera, definitivamente el invierno había terminado y los caminos estarían despejados al nuestro paso. Una señal del Altísimo en favor de nuestra sagrada misión.
_________________

[Isabella_fontana]

Leyeron la Hagiografía del Arcángel San Miguel y muchos recuerdos invadían la mente de Isabella, que como era de esperarse comenzó a narrar lo ocurrido en su familia hacía casi 20 años.

Nuestro padre era médico y de los buenos, además parecía que estaba protegido por el Altísimo. Jamás se enfermaba aunque siempre estaba con los enfermos.
Pero creo que el Sin Nombre quiso poner a prueba la Fe de nuestra familia.
Sabe Cardenal, nuestra familia y todos los que trabajaban en nuestra finca eramos muy creyentes.
Al amanecer antes del desayuno recuerdo como entre sueños, todos rezaban y lo último que se hacia antes de todos retirarse a descansar después de la cena era rezar, alabando la grandeza de Nuestro Creador.

Un día nuestra madre enfermo. Nuestro padre preparaba posiciones, que le suministraba, pero su mal no mejoraba al contrario avanzaba,.
La última vez que nuestra nana nos la dejo ver, deliraba por la fiebre y quizás por el dolor que le provocaban las pústulas que tenía por todo el cuerpo, de color como negro o muy oscuro y de algunas salía sangre y de otras pus, se le notaba ya que llevaba una túnica blanca.
Ni nos pudo reconocer mi madre, eso es algo que llevo grabado siempre en mi memoria.

Desde es día nuestra nana, una persona muy religiosa como mis padres, nos hacia arrodillar y rezar en nuestra pequeña capilla familiar que había en la finca.
Escuchábamos los pasos de mi padre, pero seguía de largo, estaba como enojado con la vida, no entraba a la capilla a rezar con nosotros.

Un día un abuelo postizo que teníamos, llego a la finca con algo muy especial. Nosotros pequeños lo abrazamos y llenamos de besos. Pero el venía con una meta, poner en el pecho de mi madre una medalla, que estaba dentro de un pequeño cofre con terciopelo rojo. La medalla antigua era de San Miguel Arcángel.
A mi me dejaron tener en las manos el cofrecillo, recuerdo como temblaba, era bien pequeño y no pesaba mucho. Gasper se animó y abrió su tapa y allí nos quedamos viendo, jamás lo olvidare, una pequeñas piedras, que estaban envueltas en una tela muy antigua de color medio amarillenta. Nuestra nana nos dijo que esa tela había pertenecido a San Miguel antes de ser elevado a los cielos.
Eso llamó nuestra atención de niños, que eran o porque estaban esas piedras allí.
Recurrimos a la única persona que estaba al 100 por ciento con nosotros en esos días, nuestra nana.
Ella nos contó que esas piedras eran muy valiosas ya que eran parte de las que un rayo enviado por Dios había destruido una de las paredes de la cárcel donde estaban prisioneros en ese tiempo Miguel y Timoteo.
Cuando eso ocurrió, Timoteo se dio cuenta que el Altísimo estaba con Miguel su gran amigo. Por lo tanto antes de huir de la cárcel, tomo unas piedras que envolvió en una trozo de la túnica de San Miguel que quedo atrapada entre el derrumbe, en la tela había manchas de sangre de los golpes que San Miguel tuvo al derrumbarse la pared, después subió a su barca, ya que era Timoteo era marino.

Yo me arrodillé, Gasper me siguió, eramos pequeños pero nos dábamos cuenta que en ese cofre estaba una acción que Dios había hecho para salvar a dos personas justas y virtuosas.
Yo con un dedo me animé a tocarlas y después bese mi dedo, Gasper hizo lo mismo y allí arrodillados con nuestra nana, frente a la habitación de nuestros padres nos pusimos a rezar.
Recuerdo como se había hecho casi de noche, que nuestra nana quería que merendáramos, pero nosotros seguíamos rezando por un milagro para nuestra querida madre.

Salió de la habitación nuestro padre y con lágrimas en los ojos se arrodillo, nos tomó de las manos y rezó con nosotros.
Eso fue algo muy especial, ya mi padre no estaba enojado con el mundo , algo había sucedido en esa habitación , algo muy especial.
Paso seguido me sacaron de las manos el cofrecillo y lo llevaron dentro, quizás junto a mi madre.
Nuestra nana nos reto, eran horas que llevábamos rezando con Gasper sin casi darnos cuenta, nos levanto como pudo y nos llevo a comer algo.
Recuerdo que cuando nos acostaron , los dos tuvimos la misma idea seguir rezando por mamá. Y eso hicimos hasta que parecía que nos quedamos helados hasta los huesos.
Allí hablamos, nuestro padre salió de la habitación y nos vio. No nos retó cosa que esperábamos los dos. Al contrario nos llevó donde estaba mamá, que dormía tranquila. La medalla envuelta en ese pedazo de la túnica de San Miguel, estaba sobre su pecho y esas pústulas oscuras que despedían mal olor y pus, habían desaparecido, solo quedaba como unas manchitas rosadas.
Vi el cofre sobre la almohada pegada a su cabeza.
Besé la mano de mi madre ya quería verla despierta y con nosotros, leyéndonos la vida de Santos.

Muchos años después me di cuenta que en nuestra casa habíamos sido participes de un milagro.
Desde ese día mi padre cambio mucho, si bien siempre fue creyente, era un hombre de ciencias. Pero desde ese momento cuando preparaba un remedio, se le escuchaba rezar y pedir el auxilio de nuestro Señor para que el enfermo mejorara.

Isabella miró a su hermano, los ojos estaban brillantes de lágrimas que ella se esforzaba para que no salieran.

En resumen la medalla era muy antigua y estaba en el cofre, pero no se la pusieron sola sobre el pecho de mi madre, solo que la envolvieron con el pequeño género antiguo que había pertenecido a San Miguel en vida.
Una vez que mi madre estuvo bien o sea al día siguiente, ya la pudimos ver, nuestra madre nos reconoció y nos habló. Ya no tenía ni las manchitas rosadas que le había visto la noche anterior.
Por un momento mi madre tomó la medalla que permanecía envuelta en la tela y nos pidió que nos acercáramos y la besáramos.
Nos explico que el Arcángel San Miguel la había sanado, que había sido el intermedio de Nuestro Creador.
Nuestra nana nos sacó fuera mi madre debía dormir por un momento.
Nos encontramos con mi padre que nos dijo que cuando ya nuestra madre estuviese con fuerzas , iríamos a agradecer y devolver la reliquia de San Miguel.
Nos dijo que sería un viaje muy especial ya que había otra reliquia del Arcangel en su ermita.


Isabella se silencio por un momento , notó la emoción de Gasper, muchas cosas habían pasado desde esos días.
Su hermano le apretó las manos, sabía que no podía verla llorar y tragó saliva y respiro hondo.
Miro a su Eminencia el Cardenal Lisandro y no sabía que pensar, que estaría pensando de lo que le había relatado. Solo sabía que debían ir a esa ermita y rescatar si Dios así lo permitía las reliquias de San Miguel.
De a poco los recuerdos llegaban a su mente, recordó como llegaron, como era la ermita, el cementerio abandonado a un costado, cuando entraron....pero ya había hablado demasiado, debía dejar descansar y meditar un poco al Cardenal Lisandro y a ellos mismos.
Miro hacia afuera y noto que el crepúsculo ya casi llegaba. tanto había hablado, se avergonzó de ser una habladora compulsiva como solía decirle su mellizo.
_________________
fides scutum nostrum est, amor telum nostrum est

[lisandross]

Con mucha atención Lisandro anotaba cada palabra con el cuidado de mantener el pergamino raspado lo más pulcro posible, lo que se hacía difícil por los sentimientos que le invadían con tan vívida narración, sus ojos se llenaban mientras su alma sentía una calurosa sensación de regocijo interno, sin duda la luz del Altísimo había tocado aquella familia. Tomando las manos de ambos hermanos dijo:

- Queridos Hermanos, sé que algunos recuerdos pueden ser muy difíciles de revivir, les agradezco mucho este aporte y podemos seguir el día de mañana o cuando se sientan más recompuestos.
_________________

[Gasper2011]

Ya habían pasado unos días desde la partida, Barcelona se hacía cada vez mas lejana, acercando a los viajeros cada vez más a territorios Castellanos, Isabella había narrado detalladamente lo que había acontecido muchos años atrás en el seno de la familia de los mellizos Olavarrieta Palacios.

Las conversaciones cada vez se hacían más amenas y emotivas ya que los mellizos no dejaban de recordar episodios de esa época, Gasper tomó la palabra:

Su Eminencia Reverendísima, le comunico que ya estamos por llegar al lugar donde seguramente deberemos abandonar este cómodo carruaje, no de nuestros mozos que se ha adelantado a caballo para explorar el territorio, nos estará aguardando en un punto acordado con caballos y mulas para poder acceder a la ermita.

Se que quizás sea un poco incomodo para usted, Su Eminencia, pero un trayecto no muy largo es intransitable para los carruajes, por lo que debemos montar a caballos o mulas, no se preocupe por favor, ya que un mozo guiará las riendas de su montura y la de Isabella.

Las charlas siguieron animadas, cada vez el ánimo subía y la ansiedad inundaba sus corazones, Gasper solo rezaba para que todo estuviese en su lugar, casi dos décadas habían pasado, pero en estos días los recuerdo afloraron de una manera increíble, tenía la certeza que el Altísimo deseaba que estuvieran en ese lugar y en ese momento.

Gasper recordó como su padre cabalgaba un brioso corcel, los mellizos iban detrás, Gasper guiando las riendas y llevando a su espalda a su hermana Isabella, su madre que aún no recuperaba sus fuerzas por completo, fue conducida en pequeño carro movilizado por cuatro mozos.

Pasadas unas horas, luego de una parada que habían hecho para desayunar y refrescarse ya que habían pasado la noche en el carruaje para ganar tiempo, se encontraron frente a la comitiva que ya estaba esperándolos.

Al detenerse el carruaje Gasper bajo primero, ayudando a su hermana y después al Cardenal Lisandro, que ya tenía junto a el a sus guardias personales.

Para la alegría de los mellizos además de los caballos y las mulas había un buen sillón con varas con gruezas de maderas que pasaba por debajo, Gasper agradeció al Altísimo ya que era un medio de transporte más adecuado para el Cardenal.

Gasper subió a un caballo, a Isabella la ayudaron a subir a una mula que un mozo guiaría caminando delante sujetando las riendas, el Cardenal se ubicó en el sillón especialmente preparado para poder llevarlo y luego de un tiempo de viaje, ya se divisaba la ermita.


_________________

Cura de Aranda de Duero | Vice-Prefecto Hispano Villa San Loyats |Rector y Profesor Titular Seminario Fray Tanys